Muchas personas agregan unas gotas de jugo de limón a sus frijoles debido al sabor que proporciona, pero existe una razón de salud por la que siempre se le debe agregar este cítrico al consumirlos.
Los frijoles son legumbres con un alto contenido de nutrientes como proteínas, vitaminas y minerales, especialmente de hierro.
Quienes buscan un aumento de proteínas pueden aprovechar los frijoles, pues suelen contener el doble de cantidades proteicas que se encuentran en los cereales de grano entero como el trigo.
Al ser una fuente de hierro es ideal para apoyar el metabolismo muscular y el tejido conectivo sano.
¿Por qué hay que agregarle limón a los frijoles?
El National Institutes of Health explica que el hierro tiene dos formas: hierro hemo y hierro no hemo. Las plantas y los alimentos fortificados con hierro contienen hierro no hemo, mientras que la carne, los mariscos y las aves contienen hierro hemo y no hemo.
Los frijoles y otras legumbres contienen hierro no hemo. Este tipo de hierro es de difícil absorción para el cuerpo humano.
Sin embargo, la vitamina C ayuda al cuerpo a aprovechar dicho mineral.
Los estudios han demostrado que el hierro no hemo debe combinarse con alimentos ricos en vitamina C (que se encuentra en cítricos, fresas, pimientos dulces, tomates y brócoli) o acompañarse con carnes, aves o mariscos.
Así que la razón por la que debe agregarse limón a los frijoles y otras legumbres es aprovechar por completo todos sus beneficios.
Sin embargo, no es la única forma de aprovechar el hierro no hemo de los frijoles.
Otras formas de incorporar alimentos con vitamina C para aprovechar los alimentos con hierro no hemo son los siguientes:
- Tomar un vaso de jugo de naranja.
- Beber una limonada al comer frijoles.
- Cocinar los frijoles con tomate.
Las legumbres son un alimento excelente para complementar la alimentación de niños pequeños, mujeres en edad reproductiva, embarazadas y personas mayores.