Stephanie y Andrew Braham, una pareja de Australia se encontraba regresando a su hogar después de unas vacaciones en Europa, cuando les informaron que su vuelo había sido reprogramado, el problema llegó al observar que su bebé tendría que abordar un vuelo separado de ellos.
Tanto Stephani como Andrew fueron ubicados en el nuevo vuelo, pero su hija de 13 años tenía el pasaje para otro avión.
Una pareja de Australia recibió la noticia que su bebé tendría que viajar en un vuelo diferente. | Foto: ClarinEn total, la familia tuvo que pasar 20 horas en el aeropuerto intentando solucionar el error. Desesperados por la situación decidieron acudir a los medios de comunicación para denunciar esto.
“Pasamos 20 horas, 47 minutos y 13 segundos hablando por teléfono con Qantas durante un período de 24 horas antes y más de 55 llamadas telefónicas separadas antes de que finalmente aceptaron reservarnos nuevos vuelos a casa”.
Foto: The IndependentFinalmente, la pareja recibió una respuesta y llegaron al acuerdo en el que los tres fueron puestos en el mismo vuelo. El único problema es que tendrían que esperar 12 días más en Roma.
La familia señala que esta reprogramación incrementó los gastos de su viaje y aseguran que la única forma en la que se sentirán tranquilos es cuando su vuelo despegue.
Foto: The IndependentLa empresa aseguró que lamentan los inconvenientes provocados a esta familia y que se trata de un “error administrativo de fondo”, por lo que se harán cargo de los gastos extras que realicen en Roma.