La diabetes insípida es un trastorno poco frecuente que provoca un desequilibrio de líquidos en el cuerpo. Esta afección provoca que el cuerpo produzca gran cantidad de orina y sed excesiva, incluso luego de beber.
Existen diversos tipos de diabetes insípida. Estos son:
- Central. Debido al daño a nivel cerebral que impide la producción de vasopresina, una hormona antidiurética.
- Nefrogénica. Una alteración renal que impide que la vasopresina actúe.
- Dipsogénica. Daño en el sistema productor de la sed, que provoca un aumento gradual de beber agua y un aumento de la excreción renal de agua.
- Gestacional. Ocurre durante el embarazo.
Síntomas de la diabetes insípida
Entre los principales síntomas se encuentran:
- Sed excesiva. Esta puede ser intensa e incontrolable. Por lo general existe una necesidad por beber grandes cantidades de agua o por agua fría.
- Volumen excesivo de orina.
- Micción excesiva. Se siente una necesidad por orinar cada hora a lo largo del día e incluso por la noche.
- Orina muy diluida y pálida.
Si unn niño o bebé tiene este trastorno puede experimentar estos síntomas:
- Gran cantidad de orina pálida.
- Mojar la cama.
- Tener sed excesiva y preferencia por el agua y bebidas frías.
- Pérdida de peso.
- Poco crecimiento.
- Vómitos.
- Irritabilidad.
- Fiebre.
- Estreñimiento.
- Dolor de cabeza.
- Problemas con la visión.
- Problemas para dormir.
¿Qué causa este tipo de diabetes?
Este trastorno puede ser ocasionado por diversas causas como:
- Problemas genéticos.
- Traumatismo craneal, que es la causa frecuente de la diabetes insípida central.
- Infección en el cerebro.
- Debido a una enfermedad autoinmunitaria.
- Pérdida de riego sanguíneo a la hipófisis.
- Tumores cerebrales.
- Daño en los riñones.
Sobrellevar la diabetes insípida
Por desgracia, no existe una cura para esta enfermedad, pero sí se puede tratar.
Es necesario tratar la causa de la afección subyacente lo más rápido posible.
En algunos casos de este tipo de diabetes se pueden controlar con el uso de vasopresina.
Mientras que en otros casos los médicos suspenden el uso de algún medicamento que esté ocasionando interferencia con la función del riñón, como es el caso del litio.
Mientras que la neufragena hereditaria y la inducida por litio también se tratan consumiendo suficiente líquido para equilibrar la diuresis y tomando medicamentos para disminuir las ganas de orinar.
No tratar esta enfermedad puede generar complicaciones.
Algunas personas pueden sufrir deshidratación y desequilibrio de electrolitos peligroso.