Las agujas y objetos punzocortantes usados se deben desechar de manera segura para evitar que accidentes.
Aunque los profesionales de la salud son quienes manejan la mayor cantidad de desechos médicos, las personas con enfermedades crónicas también necesitan aprender a manipularlos antes, durante y después de utilizarlos.
Se conoce como objetos punzocortantes o cortopunzantes a los dispositivos médicos como agujas, bisturís, lancetas, lapiceros de insulina y otras herramientas que penetran la piel.
¿Por qué es necesario desechar los objetos punzocortantes de forma especial?
El desechar los objetos punzocortantes de manera segura ayuda a proteger a quienes manejan los desechos y también a las personas que conviven dentro del hogar.
El manejar bien los desechos ayuda a disminuir el riesgo de propagación de patógenos que causan la hepatitis o el SIDA, ya que estas enfermedades pueden ingresar al cuerpo si se perfora la piel.
Cómo manipular correctamente los objetos punzocortantes
Los objetos sanitarios como agujas y bisturís se deben manipular de la siguiente manera:
- Nunca compartirlos. Algunas enfermedades graves se propagan a través del contacto directo con sangre infectada. Es importante no utilizar jeringas de insulina, lapiceros de insulina o lancetas ya utilizadas por otra persona, pues se corre el riesgo de exponerse a estas enfermedades.
- No recoger jeringas o agujas usadas. Si se encuentra una jeringa o una aguja ya utilizada, es importante no utilizar las manos desnudas para recogerlas. En lugar de ello puede utilizarse una toalla de papel, una pala o una escoba y un recogedor para levantarlas y luego eliminarlas de manera apropiada.
- Mantenerlos fuera del alcance de los niños. Debido a la curiosidad de los menores, pueden llegar a picarse con alguno de estos objetos. También se deben mantener fuera del alcance de las mascotas para evitar que las traguen.
- Las jeringas se deben desempacar hasta el momento de utilizarse.
- No doblar ni romper las jeringas desechables.
Objetos punzocortantes que hay que desechar
Entre los objetos más utilizados se encuentran:
- Aguja con jeringa. Estas suelen ser utilizadas para extraer fluidos del cuerpo, pero también para inyectar medicamentos.
- Bisturí. Usados para hacer incisiones en intervenciones quirúrgicas o para eliminar tejido necrótico.
- Lanceta. Este instrumento es una hoja corta de doble filo, y el cual se utiliza para pinchar y extraer gotas de sangre en algunas pruebas. Lo común es que diabéticos la utilicen para mantener el control de su nivel de glucemia.
- Autoinyector. Estas son jeringas para inyectar medicamento ya preparado y se suele utilizar en casos de emergencia. Un ejemplo son las plumas de epinefrina, utilizadas cuando ocurre una reacción anafiláctica.
¿Cómo eliminar las agujas y demás objetos punzocortantes de manera segura?
Algo que debe quedar claro es que las agujas y demás objetos punzocortantes no se pueden desechar en la basura regular ni en el inodoro.
Existen recipientes aprobados por la FDA para el desecho de agujas y objetos punzocortantes; sin embargo, también se puede utilizar cualquier recipiente de plástico rígido como los de suavizante de tela y mantener su tapa para evitar accidentes.
La manera más segura de desechar una aguja usada es colocarla de inmediato en el recipiente para desecho, esto con el fin de reducir el riesgo de pinchazos o heridas. En este recipiente únicamente se desecha la aguja, su tapa se debe desechar en la basura para plástico.
Cuando el recipiente de agujas llegue a 2/3 de su capacidad es necesario acudir a un centro de desechos de este tipo.
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