En ocasiones anteriores, los turistas han protestado porque los comerciantes se aprovechan y les intentan cobrar más que un nativo del lugar; sin embargo, lo que le ocurrió a la persona de este caso sorprendió aún más, pues en un restaurante le cobraron por cortar un sándwich.
Detalles del caso:
Un turista decidió exponer un restaurante ubicado en Italia porque le cobraron 2 euros tan solo por cortarle un sándwich. “Una tostada se sirve ya cortada en dos mitades exactas. Éramos dos y pedimos una tostada que nos comeríamos juntos en la mesa. ¿Pero tenemos que pagar por partir la tostada en dos? Increíble, pero cierto”, dijo.
Tras realizar la publicación, donde dejó ver la factura, fue la propia propietaria quien decidió hablar. “Tuvimos que utilizar dos platos en lugar de uno y el tiempo para lavarlos se duplicó”, explicó Cristina Biacchi.
Y agregó: “Nadie protestó, y para mí eso es extraño. Ahora es muy fácil esconderse detrás de un ordenador y hablar mal de un lugar”.
El caso trascendió más allá del país, pues se volvió viral.