En los últimos años muchas personas han adoptado la tradición de regalar un libro y una rosa el 23 de abril, pero ¿de dónde surgió esa costumbre y cuál es el origen?
El 23 de abril es el Día Internacional del Libro, día que coincide con la fiesta de San Jorge.
La razón por la que UNESCO acordó que el 23 de abril se celebre el Día Internacional del Libro debido a que corresponde con la fecha del deceso de Miguel de Cervantes, Garcilaso de la Vega y William Shakespeare.
Curiosamente, en esta misma fecha nacieron y murieron otros autores relevantes como: Maurice Druon, Haldor K. Laxness, Vladimir Nobokov, Josep Pla, Manuel Mejía Vallejo y William Wordworth.
En España al celebrarse también el día de San Jorge o Sant Jordi ocurre algo que poco a poco se ha ido extendiendo a otras partes del mundo, incluido Guatemala.
¿Por qué se regalan libros y rosas el día de Sant Jordi?
Las rosas se regalan debido a la leyenda de San Jorge.
De acuerdo con la leyenda, un dragón enorme aterrorizaba la villa de Montblanc en Cataluña (España). El mítico monstruo llegó a escoger a la princesa Cledolinda como ofrenda, pues los sacrificios de ovejas y cabras no eran suficientes para él.
Entre quienes presenciaron el rapto se encontraba un caballero de reluciente armadura, quien sin temor se enfrentó al dragón.
El caballero logró imponerse ante la bestia, en el proceso lo humillaron paseándolo por la ciudad como si fuera un perro. Tras ello, Sant Jordi acabó con el dragón en las puertas de la ciudad.
La leyenda señala que el dragón fue absorbido por la tierra y de ese lugar surgió un enorme rosal del que brotaron rosas rojas.
San Jorge obsequió a la princesa una de estas rosas. Y de esta leyenda, la localidad de Cataluña adoptó la tradición de regalar rosas el 23 de abril.
Al coincidir con la fecha del Día Mundial del Libro establecida en 1995, muchos catalanes comenzaron a regalar, además de rosas, libros.
La tradición surgida en Cataluña se expandió a diversas regiones de Europa, y en años recientes a América, incluido Guatemala.