El pasado 13 de marzo de 2024, Mirna Noemí Pérez Aleja pidió a su esposo ir a recogerla a su trabajo para regresar a casa; sin embargo, ambos no regresaron.
Julio, la pareja de Mirna, regresó a la casa de los padres de su esposa, residencia donde vivían, la mañana del 14 de marzo señalándoles que no la encontró la noche anterior.
Ese mismo jueves, la familia alertó a la Policía Nacional Civil (PNC) de la desaparición de Mirna, así como de los episodios de violencia que llegó a sufrir a manos de su pareja.
El cuerpo de Mirna fue encontrado el 15 de marzo frente a la casa de sus padres ubicada en La Comunidad, zona 10 de Mixco, dentro de un vehículo que la noche anterior condujo la pareja sentimental de la mujer de 30 años.
El principal sospechoso de este femicidio es Julio.
Cómo inició la relación entre Mirna Pérez y su agresor
Marta Aleja Pérez, madre de Mirna, habló con el equipo de Expedientes sobre cómo inició la relación entre su hija y quien resultó ser su agresor.
Mirna presentó a Julio a su familia cuando se enteró que tenía 3 meses de embarazo, en ese momento les comunicó que también tenían planes de casarse.
Aunque la familia no estaba de acuerdo con una boda tan apresurada, abrieron las puertas de su casa para que ellos vivieran en el mismo hogar.
Los padres concuerdan que el matrimonio de Mirna inició con mentiras, pues no tenía vivienda, algo que aseguró tener a su pareja y a la familia de esta.
Sin embargo, las mentiras rápidamente se convirtieron en agresiones por parte de él hacia Mirna y sus tres hijos.
Justo Pérez, padre de Mirna, relató que tuvo que interceder en repetidas ocasiones para evitar que su hija y sus nietos fueran agredidos.
Mirna pretendía poner fin a su matrimonio
La madre de Mirna reveló que su hija le comunicó sus deseos de poner fin a su matrimonio con Julio, pues estaba cansada de los malos tratos.
Sin embargo, antes de firmar el divorcio, acabaron con su vida.
Presunto femicida intentó escapar
Tras interponer la denuncia por la desaparición de Mirna, el Ministerio Público llegó a la residencia de la familia y solicitaron a Julio las llaves de su vehículo para realizar la inspección de rutina.
En ese momento comenzaron a notar el nerviosismo de Julio, quien pidió tiempo para buscar la llave del automotor. Mientras realizaba una búsqueda en el segundo nivel, escapó.
Al abrir el vehículo encontraron el cuerpo de Mirna, así como el vestido que usó cuando se casaron. Hasta ahora, la familia desconoce qué pretendía hacer con el vestido de novia de su hija.
El sábado 16 de marzo, las autoridades detuvieron a Julio, quien se escondía en una fosa séptica.
Ese día de la captura, la familia de Mirna supo de otra de las cosas que ocultaba Julio: tenía otra familia.
Ahora solo esperan el caso de Mirna continúe siendo investigado y el responsable reciba una sentencia justa.