Michelle Ramírez es una joven de 22 años de edad que inició labores hace una semana en una cevichería ubicada en Amatitlán con la ilusión de alcanzar estabilidad económica, pero presuntos sicarios acabaron con sus sueños y su vida con una ráfaga de disparos. Los desconocidos irrumpieron en el negocio que también funcionaba como negocio de licores y dispararon sin la menor contemplación.