Este lunes Israel descartó cualquier tregua con Hamás para permitir la entrada de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza.
El pasado sábado 7 de octubre Hamás realizó un ataque contra el territorio israelí, el cual dejó más de mil 400 personas, además del secuestro de 199 personas, de acuerdo con las autoridades de Israel.
En respuesta, el ejército israelí prometió “aniquilar” a Hamás, lanzando una campaña de bombardeos en la Franja de Gaza, en la que al menos 2 mil 750 personas perdieron la vida.
En pocos días, los 2.4 millones de palestinos que habitan la pequeña región de 362 km2 han intentado escapar hacia el sur.
Philippe Lazzarini, director de la UNRWA, explicó que en estos días “ni una gota de agua, ni un grano de trigo, ni un litro de combustible han podido entrar en Gaza”.
Aunque existe ayuda humanitaria para los civiles, esta se encuentra detenida en el paso de Rafah, entre Egipto y Gaza.
“Por el momento no hay un alto el fuego para la ayuda humanitaria en la Franja de Gaza y la salida de extranjeros”, indicó en un comunicado la oficina de Benjamín Natanyahu.