Los fuegos artificiales no puede faltar en las fiestas de fin de año y en espacial en el 31 de diciembre. Sin embargo, los animales, como los perros y gatos, sufren con la pirotecnia al punto de estresarlos hasta la muerte.
Es el caso de Magui, una perrita que el pasado 14 de diciembre falleció abrazada a su dueño producto del terror que le generó el ruido de los fuegos artificiales, según señala Infobae.
“Era viejita y le tenía terror a la pirotecnia. No sabíamos dónde más meterla mientras otros se divertían, ella la estaba pasando muy mal. Le agarró un ataque, llamamos a todos los veterinarios de Esquel para que nos ayuden ¡y ninguno nos atendió! La perra murió en los brazos de mi hijo, rogándome que llame a alguien para que la viniera a auxiliar”.
El mensaje es de Antonella Modasjazh, de la ciudad de Esquel, al sur de Argentina, quien dio a conocer el caso de Magui que falleció en los brazos de su hijo. La mujer hizo una llamado para que la ciudadanía tome consciencia del daño que le hace la pirotecnia a los animales.
El caso se hizo conocido luego que este fin de semana la organización ADAE “Adoptá-Esterilizá-Educá” compartiera una publicación en las redes sociales con el mensaje de Antonella.
“Llamamos a todos los veterinarios de Esquel para que nos ayuden ¡y ninguno nos atendió!”, se queja, y termina: “Les pido, por favor, dos cosas: pirotecnia cero; veterinarios, hagan urgencias”, fue el llamado de la mujer.
Foto: Redes sociales