Expertos indican que las deportaciones priorizarán a las personas que tengan cargos criminales, enfocándose principalmente en aquellos con antecedentes delictivos. Esta medida busca asegurar que se tomen acciones contra individuos que representan una amenaza para la seguridad pública. Asimismo, se espera que esta política reduzca el número de infractores reincidentes en el país, mejorando la efectividad general del sistema migratorio y de justicia.