A partir del 30 de junio del año 2022, ningún contribuyente afiliado al régimen general del Impuesto al Valor Agregado (IVA) podrá emitir facturas en papel, todas tendrán que ser electrónicas, así lo señaló Marco Livio Díaz, superintendente de la SAT.
La razón del cambio de papel a lo electrónico es por cuatro razones: a) ahorro de tiempo para registro, emisión y despacho de las facturas; b) eliminar el uso de papel, algo positivo desde el punto de vista ecológico; c) incremento en la productividad; y d) reducción en el volumen de papelería y espacio en archivos físicos.
Uno de los puntos más positivos es que las facturas emitidas electrónicamente, así como otros documentos tributarios, se emitirán de forma segura y ya con autorización, por lo que se puede confiar que estos documentos cumplen con las normativas impuestas por la SAT.
Desde la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) señalan que actualmente el 92 por ciento de los afiliados han cambiado al régimen electrónico. Por lo que esperan que en estos seis meses los afiliados restantes se acerquen a las oficinas de la dependencia y realicen el trámite correspondiente.
Díaz explicó que es necesario realizar el trámite desde ya, debido a que en algunos casos el cambio puede durar hasta dos meses.
Los negocios que para el 30 de junio no cuenten con facturas electrónicas y sigan entregando facturas en papel estarán sujetos a una multa de Q100.00 por cada factura emitida.
Y los consumidores que después del 30 de junio reciban en formato físico las facturas, deben comprender que estas no serán válidas en el régimen general del IVA, por lo que no se puede reclamar crédito fiscal sobre estas facturas.