El hongo negro es una infección conocida por su nombre científico “Mucormicosis”. Es una extraña enfermedad producida por la exposición al mucor, un hongo que generalmente se encuentra en el suelo, las plantas, el abono y las frutas o verduras en descomposición.
Aunque es una infección peligrosa, existen ciertas características que una persona debe tener para que la pueda contraer. Por lo que una persona sana o sin problemas del sistema inmunitario no debe temer por un contagio de este tipo.
Esta infección no es contagiosa entre las personas o animales, sin embargo, es casi imposible de evitarla porque se propaga por las esporas de hongos que están presentes en el aire y en el medio ambiente.
¿Quiénes son más propensos a esta infección?
Solo se desarrolla en pacientes con las condiciones propicias en su cuerpo, como la diabetes o la inmunodepresión causada por otras enfermedades. Es decir, personas que sus defensas se encuentren bajas.
Por ejemplo, las personas con diabetes se deben considerar inmunocomprometidos, porque debido a la diabetes se fomenta que no funcione bien el sistema inmune.
Otras personas expuestas, son los recuperados en Covid-19, porque en el tratamiento usan esteroides que reducen la inflamación en los pulmones y ayudan a atender daños en el sistema inmunológico. Pero, también reducen la inmunidad y aumentan los niveles de azúcar. Las personas con VIH o cáncer son propensas también.
Es aconsejable que al presentar síntomas como congestión y sagrado nasal, hinchazón, dolor en el ojo y visión borrosa, entre otros; la persona asista a un centro médico porque al llegar demasiado tarde no es posible de tratar.
Médicos afirman que cuando se llega con la infección muy avanzada, el 80% de los pacientes deben ser operados inmediatamente, porque de no tratarlos adecuadamente la tasa de mortalidad es del 94%.
Aunque, las operaciones pueden ser traumáticas porque en ocasiones se necesitar extirpar el ojo para que la infección no llegue al cerebro. Se conoce que el único fármaco eficaz son los antimicóticos, pero su costo es elevado. Es una inyección intravenosa antifúngica que se debe aplicar todos los días, durante ocho semanas.