Vladímir Putin, presidente de Rusia, anuncio el miércoles que los países “hostiles” podrán seguir comprando su gas natural, siempre y cuando lo cumplan con una condición.
La razón de pagar en esta moneda es debido a que esta se desplomó en los mercados monetarios tras las sanciones que Occidente impuso a Rusia por su invasión a Ucrania.
A través de la reunión televisada, el mandatario ruso señaló que algunos “países occidentales han tomado decisiones ilegítimas en cuanto al llamado congelamiento de activos rusos, minando con ello la viabilidad de sus monedas y socavando la confianza en sus monedas”.
El presidente sostuvo que “no tiene ningún sentido exportar nuestros productos a la Unión Europea, Estados Unidos, y recibir pagos en dólares, euros u otras monedas”.
El nuevo sistema de pagos iniciará en una semana a lo anunciado, y explicó que se aplicará la misma medida en el mercado interno ruso.
Expertos señalan que Rusia mantiene la “esperanza de que exigir pagos en rublos hará aumentar la demanda de esa moneda y, por lo tanto, fortalecerá al rublo”; sin embargo, esto podría hacer que algunos países dejen de comprarle gas a Rusia y continuar deprimiendo el valor del rublo.