Issy Carr, una británica de 86 años consiguió encontrar a su bebé luego de 66 años de ser obligada por sus padres a darlo en adopción.
Según explica la mujer, en junio de 1955 nació su hijo, pero sus padres la obligaron a ponerlo a cuidado de otra familia. Con el paso de los años, Issy nunca dejó de pensar en él ni de buscarlo, y gracias a un servicio de ADN, consiguió encontrarlo y descubrir que también es abuela.
A la cadena SWNS contó que ella lo había nombrado George, pero el día de su nacimiento no le permitieron verlo y mucho menos abrazarlo.
Los padres pusieron al bebé en adopción porque creían que con él no le permitiría encontrar un esposo. “Mi madre me dijo que pronto me olvidaría de él, pero nunca lo hice. Nunca perdoné a mis padres”, reveló.
El portal ancestry.com, lugar que Issy utilizó para enviar sus muestras, reveló una coincidencia en Perth, Australia: pertenecía a Kym Carthew, quien resultó ser su nieta.
Cathew había ingresado al portal para buscar al mismo hombre (su padre), porque nunca lo había conocido. Gracias a Internet consiguieron encontrar a “George”, quien se llama Keith Garrahy y vive en Australia.
La familia adoptiva de Keith emigró a Australia cuando este tenía 15 años.
Madre, hijo y nieta ya hablaron a través de Zoom, y esperan reunirse tan pronto como sea posible.
Fuente: El Siglo de Torreón