Decenas de familiares llegan a la morgue del INACIF para identificar y reclamar los cuerpos de sus seres queridos, víctimas del trágico accidente ocurrido en la madrugada del lunes.
Mientras la espera se prolonga, la solidaridad se hace presente con vecinos que reparten café y alimentos, así como con la Cruz Roja, que instala carpas para resguardar a quienes enfrentan el frío y la lluvia.
En medio del dolor y la incertidumbre, las familias permanecen en los alrededores del lugar, aguardando respuestas y el momento de despedir a sus fallecidos.