La capital de Australia, Canberra, está siendo azotada por fuertes tormentas acompañadas de granizo del tamaño de pelotas de golf. Múltiples automóviles quedaron abollados y ventanas de edificio se rompieron. Autoridades informaron que más de 1.000 casa quedaron sin electricidad.
En Nueva Gales del Sur, el agua ayudó a que se extinguieran la mayoría de los incendios que se registraban en la región.
Mirror
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Aunque para el personal del zoológico de Somersby también representó el tener que trabajar por rescatar a los koalas y otros animales de las lluvias torrenciales, y el tener que controlar a los caimanes incluso con una escoba cuando estos intentaron escapar de sus recintos por la crecida de la lluvia.
Se cree que esta inundación es la peor de las ocurridas en los últimos 15 años.
NBC News
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