Janiece Jenkins, una maestra de tercer grado de una escuela de Nueva Jersey (Estados Unidos) se convirtió en una heroína para una familia al salvar a un niño que se ahogaba con el tapón de una botella de agua.
El momento quedó grabado por una cámara instalada en el salón de clases.
Las imágenes muestran cómo el niño intentó abrir una botella de agua usando los dientes, segundos después, por la presión, la botella termina “estallando” empujando el tapón hacia la garganta del menor.
En medio de la dramática situación, el niño caminó hacia la profesora Jenkins. Ella se percató de inmediato de lo que ocurría y le aplicó la maniobra de Heimlich para lograr que el menor volviera a respirar.
Luego de hacerse conocido el incidente, Jenkins explicó: “Realmente no pensé, solo actué”.
“Vi que necesitaba ayuda y me puse en acción para ayudarle. No podía respirar, su rostro estaba bastante pálido y tenía una mirada de desesperación”, añadió la maestra.
Lo increíble de este caso es que la profesora con 14 años de experiencia en el ejercicio docente, recibió hasta hace unas pocas semanas una capacitación de primeros auxilios básicos y reanimación cardiopulmonar.