Producto de las intensas precipitaciones, las autoridades de salud advierten sobre el aumento de enfermedades estomacales, como diarrea, cólicos abdominales y en lagunas ocasiones fiebre.
Las lluvias producen precipitaciones que ocasionan deslaves, los cuales pueden traer basura o residuos tóxicos, los cuales podrían terminar en cultivos y, por consiguiente, la contaminación de los productos.