La cámara HiRise a bordo de la sonda Mars Reconnaissance Orbiter capturó la imagen de una estampa muy peculiar en la corteza del planeta rojo.
Según la NASA, la formación rocosa natural, pero su parecido con la cara de un oso, es innegable. Una grieta circular podría deberse al asentamiento de un depósito sobre un cráter de impacto enterrado.
El equipo de HiRise sugirió que esta estructura colapsada puede ser un respiradero volcánico o de lodo. Esta no es la primera vez que logran captar un elemento en Marte que resulta extrañamente familiar.
Teniendo en cuenta que Marte siempre está bajo vigilancia constante, ya sea desde su superficie o desde el espacio, no resulta sorprende que cada cierto tiempo aparezcan ilusiones ópticas como estas desde su superficie rocosa.