Karla Anaya es el nombre de la joven que murió tras someterse a una rinoplastia en una clínica privada en Ciudad de México (México).
La joven, de 28 años, buscaba mejorar su apariencia, por lo que acudió a una clínica ubicada en una de las zonas más exclusivas de la ciudad y tras algunas reuniones se programó la operación para el 29 de septiembre.
“Pensamos que por ser Polanco sería una clínica buena. La cirugía demoró aproximadamente cuatro horas y media y la traíamos a casa. Después de eso empieza con muchas náuseas”, explicó la hermana de la víctima.
Sin una mejoría, la familia se puso en contacto con el cirujano a cargo de la operación, quien le recetó un medicamento para prevenir vómitos.
La hermana explicó que eso empeoró la condición de Karla. “Ella empieza a cambiar la realidad y nos confundía de personas (…) y le diagnostican posible meningitis”, explicó la hermana.
Durante 10 días, Karla permaneció internada en una clínica, en donde la sometieron a varios estudios, pero no lograron detectar la presencia de una bacteria específica.
Pese a los antibióticos, la joven no mostró mejoría. El pasado 12 de octubre, Karla falleció.
El reporte médico indica que la joven falleció por meningoencefalitis y complicación de rinoplastia.
Ahora la familia de Karla exige justicia, mientras que la clínica en donde se sometió a la cirugía estética fue cerrada.