La policía japonesa arrestó a Yumi Yoshino, una mujer de 48 años, que mantuvo el cuerpo de su madre fallecida en un congelador durante 10 años.
Según explicaron las fuentes policiales, la mujer explicó que encontró a su madre fallecida y decidió esconder el cuerpo porque “no quería mudarse” de la casa que compartían en Tokio.
Las autoridades indicaron que el cuerpo no presentaba ninguna herida visible, por lo que se cree que falleció por causas naturales.
Medios indicaron que el cuerpo fue descubierto por el personal de limpieza, luego que Yoshino se viera obligada a abandonar la residencia por no pagar el alquiler.
Fuente: La Opinión