Este año, más de 200 incendios forestales han dejado gran parte de los bosques nacionales afectados.
Varios departamentos han sufrido pérdidas importantes de flora y fauna, además de daños materiales.
La temporada seca, que abarca principalmente los meses de marzo y abril, ha contribuido al aumento de incendios forestales, dificultando el control de los mismos y provocando mayor devastación.