Durante la tarde del 01 de junio se registró un tiroteo en un hospital de Tulsa en Oklahoma (Estados Unidos), el cual cobró la vida de cuatro personas, y ahora se sabe que el autor era un paciente.
Un día después de este nuevo episodio de violencia con armas de fuego, las autoridades dieron más información sobre el responsable.
Se trata de Michael Louis, de 45 años, un paciente que recibía atención médica en el mismo centro asistencial. Medios estadounidenses señalaron que Louis se sometió a una cirugía de espalda el pasado 19 de mayo en dicho hospital.
Se detalló que el hombre llamó en varias ocasiones a su médico, y una de sus víctimas, para quejarse del dolor y buscando recibir un tratamiento adicional. El mismo día del ataque realizó una llamada a su médico.
No se informó qué ocurrió durante esa llamada. Lo que sí revelaron los investigadores es que ese mismo día Michael compró un fusil de asalto y se dirigió directamente al hospital de Tulsa.
Richard Meulenber, capitán de la policía, informó: “Fue muy a propósito a este lugar, fue a un piso muy concreto y disparó con un fin muy concreto”.
Su objetivo era al médico que lo atendía: el doctor Preston Phillips; sin embargo, durante su trayecto asesinó a la doctora Stephanie Husen, Amanda Green y William Love, posteriormente se quitó la vida.
Aunque otras personas sufrieron lesiones, estas no representan un peligro para su vida.
Se desconoce la motivación del atacante.