Mediante el acondicionamiento de campamentos humanitarios en el municipio de San Andrés Cuilco, departamento de Huehuetenango, el Gobierno de Guatemala cumple con brindar ayuda humanitaria a refugiados mexicanos que huyeron de la violencia en su país.
Son más de 300 personas que fueron atendidas con kits básicos, abrigo y alimentos, tras ser empadronados por representantes del Estado y organizaciones que velan por los derechos humanos. Asimismo, se supo que más de 3000 soldados guatemaltecos fueron desplegados a la frontera con México para salvaguardar la soberanía nacional.