Un turista decidió vivir una experiencia envuelta en adrenalina sin imaginar que sería la última de su vida. Se trata de Sergio Murilo, quien subió a una tirolesa en la playa de Canoa Quebrada y mientras descendía grabó su propia muerte.
El hombre de 39 años había viajado a Aracati, estado de Ceará, Brasil e inició una grabación mientras experimentaba el momento de adrenalina; su esposa también estaba filmando emocionada, pero en ese instante ocurrió una tragedia.
Una viga se derrumbó y provocó que Murilo se precipitara al suelo. En las dos grabaciones captadas tanto por el hombre como por su esposa se observa todo.
Murilo viajaba feliz y de pronto cayó, en el video se ve cómo todo se agita. Por otro lado, en la grabación de su esposa se observa desde otro panorama cómo cae e impacta, provocándose su muerte.
Denuncian negligencia:
El abogado de la familia denunció al dueño del equipo por negligencia, puesto que fue una viga de apoyo del equipo la que se derrumbó durante el descenso y provocó la caída de Murilo.
Al respecto, el abogado João Pedro Monteiro comentó: “Las vigas de apoyo, que eran de madera, no estaban bien enterradas, estaban enterradas solo en un nivel superficial de la arena. Por lo tanto, no proporcionaron la firmeza necesaria para quienes realizaron el recorrido”.