En una ciudad de Cardiff en Gales, la cámara de seguridad de un bar captó cómo una mujer estrelló un vaso de vidrio contra el rostro de otra mujer, quien resultó ser maestra del hijo de la agresora.
Según explicaron los medios locales, la docente de secundaria se encontraba en el lugar con una amiga y la madre de su estudiante.
En el metraje se observa a la mujer discutir con la maestra de su hijo en el interior del establecimiento, y segundos después la conversación se vuelve violenta. Kelly Thomas, de 38 años, arrojó el líquido de su vaso sobre la docente y luego la golpeó con la cristalería.
Por el momento se desconoce qué originó la discusión verbal y el desenlace que dejará cicatrices permanentes en el rostro de la docente.
La afectada explicó al medio local Walesonline: “El incidente realmente afectó mi día a día, tengo una cicatriz física y el daño psicológico es significativo. Realmente luchó por aceptar lo que sucedió y cómo me dejó sintiéndome. Tengo ‘flashbacks’ y puedo recordar a la gente diciendo ‘Oh, Dios, mírala a la cara’”.
La agresora, que fue detenida en el mismo lugar, señaló sentirse arrepentida por lo que hizo y se encuentra realizando terapia de control de ira, además debe pagar una multa de 600 libras esterlinas en compensación.
La educadora agregó que el castigo que recibió la mujer no compensa cómo se siente actualmente.
“Mi cicatriz ha cambiado la forma en que me veo a mí mismo, era una persona sociable, pero ahora tengo crisis nerviosas antes de ir a cualquier parte. Lo veo cada vez que me miro en el espejo y he perdido mucha confianza”, indicó la docente.