El cuerpo de la adolescente guatemalteca fallecida en un tiroteo en una escuela de Tennessee, ya se encuentra en territorio nacional.
El féretro de la menor fue trasladado a Guatemala para darle sepultura en la tierra que la vio nacer.
El pasado 22 de enero la joven de 16 años se despidió de sus familiares sin saber que la tragedia la encontraría en su centro de estudios.