Edgar Giovani Molina, un joven de 29 años, quien desapareció en julio de 2020 y supuestamente, su cuerpo sin vida había sido entregado; sin embargo, los familiares realizaron un descubrimiento en el día del funeral.
Según comentaron, el velatorio habría iniciado, pero cuando un familiar pidió verlo por última vez se llevó una gran sorpresa: el cuerpo era de otra persona.
¿Qué sucedió?
Hace algunos meses, la Fiscalía de Tijuana notificó a la familia que se había encontrado un cuerpo en una fosa común que coincidía con el ADN de Molina. Ante ello, los familiares se apresuraron para reunir los cinco mil dólares que pedían para la exhumación del cuerpo, el cual se llevó a cabo tras el pago.
Posteriormente, las personas que eran cercadas al joven realizaron los preparativos para velarlo y después de tanto sufrimiento, sepultarlo; sin embargo, a pocas horas de enterrarlo se percataron que estaban velando a una persona desconocida.
Tras ello, la familia retomó la búsqueda en colaboración con las autoridades y lo que generó impacto del hecho es que comentan que no es la primera vez que sucede ese tipo de hechos.
Cabe resaltar que, el medio que dio a conocer el caso finalizó la noticia diciendo que el cuerpo de Molina fue entregado a sus familiares, quienes pudieron darle cristiana sepultura.