Una mujer de Atenas, Grecia, encontró en abril de 2015 una perrita. Desde la distancia notó que se encontraba en malísimas condiciones y su cara parecía de piedra.
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Después de tomar algunas fotografías y publicarlas por redes sociales, muchas personas se mostraron dispuestas a ayudar a la criatura.
Valia Orfanidou
Petra, como la nombraron, salía corriendo cada vez que sus rescatistas se acercaban. Finalmente y tras varios intentos fue llevada al refugio Save a Greek Stray en Oropos, Grecia.
Valia Orfanidou
Ella estaba en una condición extremadamente lamentable y tuvo que ser tratada de casi todo: sarna, una infección cutánea y lesiones de leishmaniasis, infección transmitida por insectos que puede causar la muerte.
Valia Orfanidou
La razón de su apariencia era la sarna que tenía en exceso.
Petra tenía mucho miedo, no quería salir de su jaula, no se dejaba tocar por su cuidadora y gruñía a otros perros del refugio.
Valia Orfanidou
Pero semana a semana, Petra se volvía un poco más valiente.
Petra cambió totalmente, tanto física como emocionalmente.