Según vecinos y testigos, indicaron que dos sicarios encontraron a Edgar Leonel Hernández, de 40 años y sin ningún reparo, empezaron a dispararle varias veces. Algunos indicaron que le dieron hasta el tiro de gracia para asegurar su muerte. Bomberos llegaron a la escena del crimen y asegurar que tenía destrozado el cráneo.