En Huehuetenango, los feligreses de una iglesia evangélica se mostraron sorprendidos cuando fueron víctimas de la delincuencia, ya que sujetos desconocidos se llevaron varios artículos de la congregación, incluyendo una cocina, guitarras, un amplificador y equipos de sonido.
Las autoridades se acercaron al lugar para tomar la denuncia y recabar indicios que permitan identificar y capturar a los responsables.
Este incidente ha dejado a la comunidad religiosa con un profundo sentimiento de vulnerabilidad, impulsando un mayor llamado a la seguridad en la zona.