Los niños que sufren de labio leporino necesitan cuidados dentales específicos, los cuales deben iniciar desde edades tempranas.
El labio leporino y las fisuras palatinas son defectos congénitos de origen desconocido. Estos pueden detectarse a través de ecografías antes que el niño nazca, y ayuda a los padres a estar más preparados al momento del nacimiento.
La falta de continuidad en el labio o en el paladar no solo afecta la apariencia de la persona, también causa complicaciones para comer, hablar y problemas dentales.
El labio leporino puede tener distinto tamaños y afectar diferentes tejidos. Puede ir desde una pequeña fisura que afecta solo el labio, a una fisura más amplia que involucra el labio y se extiende a la nariz, hasta una hendidura en el paladar.
La presencia del labio leporino afecta la lactancia, la alimentación, el habla, la audición y la formación de la dentadura.
Problemas dentales en niños con labio leporino
Debido a los múltiples inconvenientes que causa el labio leporino se buscan soluciones desde el momento del nacimiento.
En cuanto a los problemas dentales, las piezas dentales más cercanas a la fisura suelen ser las más afectadas. Otras consecuencias son:
- Mayor prevalencia de caries y problemas periodontales.
- Hipoplasias del esmalte.
- Anomalías de forma, tamaño y número de piezas dentales.
- Malposiciones dentarias.
Cuidados dentales en niños con labio leporino
Los especialistas recomiendan que se lleve al niño por primera vez a consulta con el odontopediatra cuando cumple el primer año de edad, o cuando erupciona el primer diente de leche.
Será este especialista quien se encargará de seguir el crecimiento de la cara, mandíbula y erupción de los dientes de leche del paciente. Él podrá reconocer los posibles problemas a los que se enfrentará el menor. Por ejemplo, si tendrá alteraciones en la forma, tamaño, número y colocación de los dientes.
El odontopediatra es quien se coordinará con el cirujano encargado de la reconstrucción maxilofacial y seguir el crecimiento de los dientes y la mandíbula pasada la adolescencia.
Estos niños requieren una correcta higiene bucal. Los padres tendrán que ser los encargados de cepillar los dientes de sus hijos, ya que las hendiduras impiden que el menor pueda cepillarse correctamente.
El cepillado se debe realizar con un cepillo pequeño de cerdas suaves, pues esto permitirá llegar a todos los rincones de la boca.
Notas recomendadas:
Golpe de calor: Síntomas y tratamiento
Se quitó lo que creía era un grano en la punta de la nariz, pero resultó ser cáncer
Signos y síntomas iniciales del cáncer de colon