Durante la participación de este miércoles esperaba el club, debido a un presupuesto de al menos llegar a cuartos de final, no duro mucho ya que no lograron una victoria estando claros que los goles italianos tenían que llegar.
Eso supone que los 9,6 millones que la UEFA da los octavo finalistas, han volado; y también, como es lógico, los 10,6 para los que llegan a cuartos de final. Son por tanto 20 millones menos de los previstos, y la oportunidad de compensarlo, en parte, con la Europa League sería sólo si consigue proclamarse campeón, algo que el curso pasado no logró.
Deportivamente, la pérdida de prestigio es importante, lo que también tiene su impacto económico porque los patrocinadores cada vez se van a alejar más. El Barça tiene un trauma con la Champions. La pesadilla dura ya unos años, y no consigue despertar de ella.