El pasado 18 de noviembre se informó sobre un enorme conjunto de manchas en el Sol, lo cual amenaza con desatar una enorme tormenta solar en la Tierra.
Estas manchas han aparecido en la cara cercana del Sol a la Tierra y han comenzado a desatar tormentas en la superficie de la estrella. Por consecuencia, la Tierra estará pronto en la línea de estas manchas oscuras eruptivas.
El primer grupo de manchas solares fue nombrado como AR3490, a los que le siguió otro grupo nombrado AR3491.
Los expertos han indicado que este “archipiélago de manchas solares” han afectado la forma en la que vibra todo el sol.
También se ha destacado que el territorio que abarcan estas manchas ya es de 200.000 kilómetros de diámetro, es decir, más de 15 veces más ancho que la Tierra.
Las manchas ya han generado erupciones solares, al menos 16 de clase C y 3 de clase M, en los últimos días. Aunque se estima que en las próximas semanas haya más.
Las erupciones solares más peligrosas son las de clase X.
Al producirse erupciones fuertes pueden generarse eyecciones de masa coronal (CME), las cuales son capaces de llegar a la Tierra y desencadenar tormentas geomagnéticas.
Se ha explicado que las tormentas geomagnéticas pueden causar apagones de radio y provocar vibrantes auroras.
Peligro de las tormentas geomagnéticas
Una tormenta geomagnética es un fenómeno que se produce cuando partículas cargadas, provenientes del Sol, interactúan con el campo magnético de la Tierra.
Las partículas al interactuar con el campo magnético provocan perturbaciones en la Tierra.
Entre los efectos que se encuentran es la aparición de auroras en los polos. Sin embargo, también afectan las comunicaciones de radios, sistemas de navegación por satélite, equipos electrónicos e infraestructura eléctrica en general. En algunos casos pueden producirse apagones eléctricos.