Hace cinco años, el 11 de marzo de 2020, el director general de la Organización Mundial de la Salud declaró que el Covid-19 podía caracterizarse como una pandemia, significando que la epidemia se había extendido por varios países, continentes o todo el mundo, y que afectaba a un gran número de personas.
Esta declaración dio inicio a una época incierta que conllevó a un confinamiento mundial, medidas extremas de prevención y una carrera farmacéutica en busca de una inmunización.
Según datos de la OMS, la enfermedad desató más de 777 millones de contagios y provocó la muerte de más de 7 millones de personas alrededor del mundo.