Jóvenes procedentes de varios países europeos, llevan varios días reunidos en fiestas “rave” instalada ilegalmente en un área privada en el centro de Italia; las autoridades aun no han podido disolver esta aglomeración. A pesar de haber un fallecido.
Sin embargo, varias caravanas de autos y furgonetas asistieron a la zona privada para la organización de “rave”.
Stefano Bigiotti, alcalde de Valentino, critico la reunión ilegal. Refiriéndose a ella como perversa y vergonzosa.
Bigiotti ha pedido la intervención de la ministra del Interior, Luciana Lamorgese, para detener la fiesta. Además, se reportó que uno de ellos dio positivo al Covid-19.
“Han destrozaron una joya”, dijo uno de los residentes de la zona, Piero Camilli.
Giancarlo SantElia, jefe de la policía, explica que el desalojo de estas personas es imposible. Ya que son miles de participantes repartidos en una superficie de 30 hectáreas.
Mientras tanto, la zona se encuentra monitoreada por los oficiales, quienes están tratando de desalojar a estas personas para que no regresen.