Tras la condena internacional por el ataque ruso contra un hospital infantil en Mariúpol, el canciller ruso, aseguró que en el lugar no había mujeres ni niños.
Por otra parte, la información que presentó Kiev fue totalmente diferente, autoridades ucranianas confirmaron 17 heridos, la mayoría mujeres en trabajo de parto y la muerte de tres personas, entre ellos un menor de edad.
“El lugar más crítico es ahora Mariúpol, bombardeada desde el aire y con artillería. Vine aquí para conseguir un pasillo humanitario que permita a los civiles que lo deseen huir de la ciudad y para llevar ayuda humanitaria”, dijo Dmitro Kuleba.
Sin ningún acuerdo sobre la mesa concluyó este 10 de marzo la primera reunión entre el ministro de Exteriores ruso Serguéi Lavrov y su homólogo de Ucrania, Dmytro Kuleba, que se llevó a cabo en Turquía con la intervención del canciller de ese país, Mevlut Cavusoglu.
A pesar de haber iniciado con las negociaciones y de confirmar un alto al fuego junto a los corredores humanitarios, el conflicto en ambos países sigue persistiendo, evitando la salida de civiles en zonas de combate.
“También hablamos de un alto el fuego de 24 horas para resolver los asuntos humanitarios más urgentes. No hemos hecho progresos, porque al parecer en Rusia hay otras personas que deciden eso”, dijo el ministro ucraniano.