El portero de un complejo habitacional en Sao Paulo (Brasil), abandonó su lugar para auxiliar a los tripulantes de un vehículo que sufrió un accidente, frente a él, poco después se conoció que el hombre fue despedido debido a esta acción.
Se trata de Juliano Amaro da Silva Paula, quien mientras cenaba en la caseta de vigilancia, escuchó el ruido causado por el accidente. El hombre salió a investigar y descubrió que dos autos habían chocado frente a su lugar de trabajo.
“Cuando escuché a los niños gritar, me fui de inmediato. Tengo tres hijos así que fue algo automático. todo en lo que podía pensar era en ayudar a esas personas”, explicó el hombre.
Debido a que cuenta como una capacitación como rescatista, su ayuda fue imprescindible.
Juliano hizo todo lo posible para salvar la vida del conductor de uno de los vehículos que quedó atrapado.
“Cuando escuché a los niños gritar, me fui de inmediato. Tengo tres hijos así que fue algo automático. todo en lo que podía pensar era en ayudar a esas personas”, explicó Juliano.
Juliano explicó que esperó junto a la víctima hasta la llegada de la ambulancia y cuando el hombre finalmente fue llevado, él regresó a su puesto de trabajo.
Sin embargo, al día siguiente recibió su despido por abandonar su puesto de trabajo, aunque su ausencia no causó ninguna afectación a sus labores.
“Dije: ‘¿Me voy porque salvé a alguien? Hice un juramento de que si no brindo ayuda, estoy cometiendo un delito’. Me sentí enfermo. Tenía vergüenza, pero no cambiaron de opinión”, explicó Juliano a un medio local.
Tras conocerse lo ocurrido, este portero recibió al menos cuatro ofertas de trabajo, incluso de un lugar donde trabajó anteriormente.