Richard Scott William Hutchinson, un bebé, reconocido por Guinness como el bebé más prematuro del mundo, consiguió vencer todas las probabilidades y cumplió su primer año. De esta manera, ha conseguido el récor como el bebé más prematuro que ha sobrevivido.
Este pequeño nació en el hospital Children’s Minnesota en Minneapolis (Minnesota, Estados Unidos), luego que complicaciones médicas hicieran que su madre entrara en parto. Scott nació 131 días antes de la fecha prevista, y pesaba tan solo 337 gramos.
Según explican medios locales, el bebé era tan pequeño que sus padres podían sostenerlo en la palma de una mano.
La doctora Stacy Kern, neonatóloga de Richard, indicó a Guinness: “Cuando (sus padres) Rick y Beth recibieron asesoramiento prenatal sobre qué esperar de un bebé que nació tan pronto, nuestro equipo de neonatología les dio un 0% de posibilidades de supervivencia”.
El centro hospitalario explica que la mayoría de nosocomios solo resucitan a bebés nacidos a partir de la semana 22, y Richard, con tan solo 21 semanas, era demasiado pequeño para conseguir sobrevivir. Sin embargo, tanto los padres como los médicos no se rindieron y lucharon para vencer todo pronóstico.
Los cuidados supusieron un reto para los especialistas, pues señalan que “no hay muchas investigaciones sobre cómo sacar adelante a un bebé de 21 semanas de gestación”.
El primer mes de vida de Richard fue el más delicado. Los padres debían viajar a diario para ir al hospital, ya que por la contingencia de Covid-19 no les permitieron permanecer en las instalaciones.
Poco a poco, el pequeño Richard consiguió crecer, y finalmente, en 2020, después de más de seis meses en la UCI, fue dado de alta y pudo ir a casa con sus padres.
En la actualidad, Richard continúa usando oxígeno, al inicio dependía de un tubo de alimentación, así que sus padres tuvieron que aprender a cómo atenderlo en su hogar.
¿Qué futuro le depara al bebé ‘más prematuro del mundo’?
Por el momento, los especialistas desconocen si en un futuro Richard necesitará cuidados de fisioterapia, terapia ocupacional o del habla. Lo que saben, con todas las dificultades que ha enfrentado, es que es un niño feliz y tiene inmensas ganas de vivir.
Fuente: CNN en Español