El pasado fin de semana, un fenómeno meteorológico extraordinario llevó a cinco aviones de pasajeros a alcanzar velocidades inusuales. Las unidades llegaron a superar los mil kilómetros por hora en sus viajes sobre el Atlántico.
Los vuelos 22 de Virgin Atlantic Airways, 292 y 216 de British Airways, 64 de United Airlines y 120 de American Airlines experimentaron un impulso significativo. Esto, gracias a una corriente en chorro, un fenómeno atmosférico caracterizado por un flujo de aire intenso y relativamente fuerte.
El vuelo de American Airlines, en su ruta de Filadelfia a Doha, incluso llegó a superar los mil 350 kilómetros por hora; una velocidad excepcionalmente alta para un avión comercial. Esta velocidad contrasta notablemente con la típica velocidad de crucero de alrededor de 925 kilómetros por hora para este tipo de aeronaves.
Aviones fueron empujados a velocidades extremas generando pánico entre los pasajeros
La corriente en chorro, que se desplaza de oeste a este, ha sido responsable de reducir considerablemente los tiempos de vuelo para estos aviones, permitiendo que lleguen a sus destinos con hasta 45 minutos de anticipación. Sin embargo, este fenómeno también puede generar turbulencias más severas, según han advertido los expertos.
El Servicio Nacional de Meteorología de Estados Unidos informó sobre vientos de hasta 420 kilómetros por hora a una altitud de aproximadamente 10 mil 600 metros sobre Washington; la cual coincide con la altitud de vuelo de estos aviones. Este fenómeno ha sido catalogado como el segundo viento en altura más fuerte registrado en la historia local desde mediados del siglo XX.
A pesar de las velocidades extraordinarias alcanzadas por estos aviones, es importante destacar que técnicamente no han roto la barrera del sonido. Según explican los meteorólogos, el avión está inmerso en vientos de alta velocidad, por lo que su movimiento se ve impulsado por el entorno en el que se encuentra, sin superar la velocidad del sonido.