La Cámara de Representantes y el Senado de Texas (Estados Unidos) aprobaron una controvertida ley para arrestar, encarcelar y deportar a inmigrantes en el estado.
Ahora la policía está respaldada por la ley para arrestar a cualquier persona que parezca sospechosa de ingresar ilegalmente a Estados Unidos.
Se aprobó el proyecto de ley SB 3, con el que se asignaría 1.540 millones de dólares para construir barreras fronterizas y pagar a policías para cuidar la frontera.
A esto se le añade la ley SB 4, con la cual se convierte en delito grave (y lleve a una condena máxima de 20 años) si una persona se niega a ir a suelo mexicano para ser procesado por cruce ilegal, ahora ya no permanecerán en Estados Unidos para ser procesados.
La directora de la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), Oni K. Blair, señaló que la SB 4 “está completamente desconectada de nuestros valores y de quienes aspiramos a ser como texanos”.
Defensores de migrantes han señalado cómo la SB 4 anula la ley federa de inmigración y fomenta la discriminación y acoso racial.