El pasado miércoles Nueva York anunció que volverá a cerrar las escuelas públicas para contener la segunda oleada de coronavirus, mientras en Europa la tasa de mortalidad aumenta.
El cierre de las escuelas, tuvo lugar pese al alentador anuncio de los laboratorios estadounidense Pfizer y alemán BioNTech de que su vacuna contra el covid-19 tiene una eficacia de 95 %, similar a la de su competidor Moderna (94,5 %).
Dicha cifra es mejor que los resultados parciales publicados la semana pasada y que mostraban “más del 90 %” de efectividad.
El alcalde de Nueva York dijo que las 1.800 escuelas públicas de la ciudad ofrecerán clases solamente en línea desde este jueves por un plazo indefinido, porque la tasa de test positivos superó el promedio de 3 % durante siete días. “Debemos luchar contra la segunda ola”, afirmó.
La medida ha sido cuestionada por muchos y subrayan que la tasa de test positivos en escuelas desde su reapertura en septiembre es muy inferior a la tasa promedio de la ciudad.
A falta de una estrategia nacional contra el virus, varios estados y ciudades estadounidenses han impuesto diversas restricciones que van desde el confinamiento hasta la prohibición de reuniones sociales o comer dentro de restaurantes.
Las vacunas no son una solución mágica, y los países deberán “subir la cuesta” por el momento sin ellas, advirtió el director de emergencias de la Organización Mundial de la Salud, Michael Ryan.
“Creo que debemos esperar entre cuatro y seis meses” para poder alcanzar “un nivel significativo de vacunación”, señaló Ryan.
Fuente: lafm.com.co