Un incendio se originó en la zona de contenedores de Santo Tomás de Castilla, y los fuertes vientos aumentaron la intensidad del fuego, obligando a los bomberos a utilizar chorros potentes de agua para controlarlo.
Se está llevando a cabo una investigación para determinar si la causa fue una negligencia humana o una falla técnica.
Afortunadamente, no hubo heridos ni personas afectadas por el humo tóxico, lo que demuestra la eficacia en la respuesta de las autoridades.