El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, advirtió el lunes que si las pandillas no frenan los homicidios tomará la decisión de quitar la comida que se da en las cárceles, donde se encuentran varios líderes de estas estructuras criminales.
A través de un evento televisado, Bukele señaló: “Voy a aprovechar la oportunidad para enviarle un mensaje a los criminales (…) ustedes desatan una ola de criminalidad y nosotros quitamos la comida en las cárceles (…) así que mejor estense tranquilos y déjense arrestar”.
El mandatario se refirió a los rumores de vengarse de “gente honrada”. Y rápidamente advirtió: “hagan eso y no habrá un tiempo de comida en las cárceles. A ver cuánto tiempo duran sus homeboys (pndilleros) allá adentro”.
“Les juro por Dios que no comen un arroz”, sostuvo el mandatario.
Y ante los recientes señalamientos de los organismos internacionales, indicó: “No me importa lo que digan los organismos internacionales, que vengan a proteger a nuestra gente, que vengan a llevarse a esos pandilleros si tanto los quieren, los entregamos todos”.
El mandatario señaló anteriormente que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y los periodistas como “socios de los pandilleros”. La razón es que ambos grupos señalan que el gobierno de Nayib Bukele no respeta los derechos civiles y presos.
Tras declararse estado de excepción se suspendieron varios derechos constitucionales como la defensa e inviolabilidad de las telecomunicaciones.