En su habitual discurso anual, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, advirtió que Estados Unidos y sus aliados “lamentarán” cualquier provocación hecha contra los intereses del país. Afirmó que su respuesta ante cualquier desafío será “asimétrica, rápida y dura”.
“Debo decir que hemos tenido suficiente paciencia, responsabilidad, profesionalidad, confianza en nosotros mismos y en nuestra corrección y sentido común al tomar decisiones. Espero que a nadie se le ocurra cruzar ninguna ‘línea roja’ con Rusia. ¿Dónde queda esta ‘línea roja’? Lo decidimos nosotros en cada caso”, afirmó Putin ante la Asamblea Federal.
El mandatario acusó directamente a Occidente de organizar un golpe de estado en Bielorrusia, que incluía el asesinato de su líder y aliado, Alexndr Lukashenko.
“La práctica de organizar golpes de estado, los planes de asesinatos políticos (…) eso ya es demasiado. Fue sobrepasado todos los límites”, señaló.
El líder del antiguo bloque socialista, afirmó que durante semanas Estados Unidos y la Unión Europea han denunciado que Rusia despliega decenas de soldados en las fronteras con Ucrania, pero que en ningún momento se han pronunciado ante el intento de golpe de estado en Bielorrusia.
El dirigente de Kremlin cree que las potencias occidentales están confundiendo sus “buenas intenciones” con “debilidad”, y por ello les lanza la advertencia.
Fuente: Noticieros Televisa